Que Hacer En Un Barco Que Se Hunde

Que hacer en un barco que se hunde.

Aquí esta la sabiduría: Si no puedes salir de la tormenta con Jesús, entonces quédate en la tormenta con Jesus.

Marcos 4:35 “En el mismo día, cuando llegó la noche, El les dijo, “Crucemos hacia el otro lado.” Ahora, cuando dejaron a la multitud, lo llevaron a El con ellos en la barca como estaba. lo llevaron a El con ellos en la barca como estaba. Y había también otras barcas pequeñas con él. Y se levantó una gran tormenta de viento, y las olas golpeaban dentro de la barca, hasta que ya se estaba llenando.

Estoy seguro de que los discípulos estaban emocionados para ver lo que pasaría en el “otro lado”. Lo que probablemente no esperaban era una tormenta furiosa. Cuando estaban en la mitad, yo sinceramente dudo que los discípulos estaban tan emocionados acerca del “otro lado”, como estuvieron al principio. Lo mas cercano que estaban de su destino, mas evidentes el viento y las olas se volvían.

Dios a menudo nos llama a lanzarnos a un nuevo destino, y El raramente nos da un plan desplegado de todo el viaje. Nosotros dejamos la seguridad de donde estamos y partimos hacia el “otro lado” …la mayoría de nosotros no tenemos una visión de a donde estamos yendo, ni tampoco disfrutamos de donde estamos en el camino hacia donde estamos yendo. Es a menudo en el medio donde encontramos las tormentas…el lugar de la prueba, los terrenos de prueba.

La tormenta que los discípulos encontraron en Marcos 4:37 no era una tormenta de primavera, tenia las proporciones de un huracán! Es importante también saber que estos eran pescadores, ellos pasaban su vida en el agua y no temblaban fácilmente por una tormenta. Pero esta no era una tormenta normal!El viento literalmente arreciaba, y el agua estaba llenando la barca. Asombrosamente, con la tormenta en toda su fuerza…Jesús dormía en la popa (Marcos 4:38). Alguna vez te sentiste así?Tu vida parece estar en el medio de terribles circunstancias, estas seguro que tu barca se esta hundiendo, y parece que Jesus esta dormido…tu quizás hasta le grites y quieras armar una pelea, diciendo, “Ni siquiera te importa que me este muriendo aquí?!” has pasado tiempo con El tratando de sentir Su presencia…y nada. Oraste y ayunaste, te tiraste al piso llorando y gritando, usando toda una caja de pañuelos…y nada. Buscaste una respuesta, pero no importa cuan duro luchaste contra el viento y las olas, la tormenta enfureció y no sabias que hacer. Algunos lo llaman “la noche oscura del alma”!.

En tiempo como estos, cuando parece que la barca se esta hundiendo y estamos metidos en el medio, es el tiempo para la fe. Muy fácil decirlo, dirías, pero considerándolo cuidadosamente, cuales son tus opciones en ese punto?Es el Dios o no? Y cuando El dijo, “Vamos al otro lado”, debemos emplear la fe…Dios espera que le creamos a El, que si El lo dijo, va a pasar. Si pasas tus horas llorando y azotándote, la tormenta es la misma. Si te sientas y no haces nada, la tormenta es la misma. Aun si sales haciendo saltos mortales hacia atrás y hacia adelante en la calle mientras vas declarando cosas asombrosas, es muy altamente probable que la tormenta sea la misma.

Jesus calmó la tempestad…pero también reprendió a los discípulos  diciendo “Como es que no tienen fe?” Crees que El no sabia, o estaba el preguntando con la esperanza de que ellos mismos se preguntaran? Por supuesto que El sabia, pero ellos no. Es vital para nuestro futuro que crezcamos en Fe, y crecer en Fe no ocurre porque todas las cosas siempre están bien con nosotros. Debemos aprender a conquistar nuestros temores y seguir adelante hacia el otro lado. Es fácil disfrutar nuestro presente cuando todo es color de rosas, pero debemos aprender a disfrutar donde estamos en el camino hacía donde vamos a estar, teniendo gozo y paz en el medio de la tormenta como también luego que esta ha pasado.

Si no puedes salirte de la tormenta con Jesus, entonces quédate en la tormenta con Jesus, y “déjate llevar” (Hechos 27:15). Aprende entre el viento y confía en Dios. Jesus no nos abandonará, no ahora, ni después. Deja que la Fe haga su trabajo.

Que piensas?

Gracias por escuchar, soy Social Porter con el Ministerio Viviendo en Su Nombre.

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